Han pasado varios años desde aquella vez que me dijeron preséntese, ¿quién es Ud.?

Fue una de las primeras clases que tuve cuando comencé a estudiar Psicología. Ahí estaba yo, sentado en una silla, frente al profesor, con una chaqueta de militar que había comprado unos años atrás en la ciudad de Valparaíso, mirando suspicazmente a quien me interrogaba. Decidí responder lo siguiente:

Mi nombre es Francisco Arenas, e hice una pausa. Como si algo terrible supusiera que iba a suceder. El profesor dijo: -Ese es su nombre- ¿quién es Ud.? . Atónito, pensando que ya había respondido lo suficiente, reflexione y respondí: Soy alumno de esta universidad, estudio Psicología – Eso es lo que hace-, me interrumpió, ¿Quién es Ud.?, volvió a preguntar. Me sentí tal cual un día de verano cuando tenía unos 4 años. En ese momento mi hermana hacia aseo en el living de mi casa, escuchando a Luis Miguel a todo volumen, mientras yo jugaba con una pelotita en mi pieza. Mi pieza, con un camarote, un televisor, una cómoda y todos mis juguetes esparcidos por el suelo. La pelota, verde, de goma, de esas saltarinas se balanceaba entre mis manos. En ese momento me hice una pregunta – ¿Qué tan alto rebotará esta pelota?; Decidí intentarlo. Con todas mis fuerzas la tire contra la pared. Dio un par de botes entre el suelo y la pared a toda velocidad y fue a parar a la cama de arriba del camarote. Valientemente, subí, no recuerdo cómo. Estando arriba, encontré mi pelota y sonrientemente me dije: fantástico, lo haré otra vez.

El asunto es el siguiente. Yo midiendo menos de un metro de estatura, me asomo al borde de la cama y miro hacia abajo. Contemplando lo que para mí en ese momento era un ABISMO, Tú sabes, cuando uno es pequeño, todo parece más grande en perspectiva. En este caso…más lejos. El suelo según lo que recuerdo, para mí se encontraba como a 100 metros. Al ritmo de “cuando calienta el sol”, con mis pies colgando, suspendido en la cama en altura, dije: me lanzo y dolerá. Junte toda la valentía que tenía y respondí: soy una persona, de nombre Francisco Arenas, me gusta la música, toco guitarra, amo a mis padres y a mi hermana.

Con el tiempo que ha pasado, me han hecho esa pregunta varias veces. Con los años de Psicología en mi cuerpo, tal como en esa clase, me he dado cuenta que hay cosas que funcionan y otras que no. Durante mis primeros años como profesional de la psicología, creyendo que me sabía las teorías al revés y al derecho, habiéndome titulado con todos los honores y medallas posibles, comencé a trabajar. Me di cuenta rápidamente, que en la práctica, las teorías no sirven. Pase varios años leyendo acerca de la mente, lo que otros piensan que es la manera correcta de pensar sobre la mente, sobre lo que otros piensan que hay que hacer cuando alguien te consulta. La verdad es la siguiente.

Recuerdo que una de mis primeras pacientes, clientes, persona (llámele como quiera), me consultó porque tenía crisis de pánico. Yo, aplicando todo mi conocimiento, todo lo que había leído sobre eso, era capaz de explicarlo muy bien, sin embargo, la persona volvía al consultorio semana tras semana, sino igual. Incluso peor. Y así, con muchos otros casos. La verdad no sabía cómo ayudar a una persona a no tener crisis de pánico. Frustrado, me cuestione todo lo que había hecho. Una y otra vez, sintiendo rabia, seguía buscando que hacer. Ya puedes imaginar lo que sientes al ver que todo lo que haces no obtiene ningún resultado ¿no es verdad?

Leyendo, encontré algo que se llama Programación Neuro Lingüística, que por lo que entendí en ese momento, podía ayudarme a aprender cómo ayudar a una persona a no tener crisis de pánico. Decidí estudiarlo.

Hice un diplomado llamado Practitioner en PNL. Aprendí muchas cosas. Comencé a notar como rápido y fácilmente comencé a obtener resultados con lo que hacía. Las personas se iban cada vez más aliviadas y felices de mi consulta. Motivado, decidí seguir estudiándolo.

Han pasado varios años de eso. He seguido un camino gratificante de cambios. He tenido la oportunidad de entrenar con los mejores del mundo el arte y tecnología de la PNL y la Hipnosis. Luego de un par de diplomados, entrené directamente con Richard Bandler. Una experiencia maravillosa. He conocido grandes mentores: Joaquín y Erich, que me han guiado por un camino de transformación tanto para mí, como para poder transformar las vidas de otros, ahora. Sé también que el camino no termina aquí. Estoy decidido a dar lo mejor de mí para poder enseñarte a ti y a otros como utilizar estas herramientas para cambiar tu vida.

La vida me puso este camino y creo que ha sido maravilloso seguirlo. Se trata de tener la oportunidad de conocerte a ti mismo. Todas aquellas veces te dices: ¡no se qué hacer!, esas frustraciones indican solo que hay algo mas por hacer, por buscar. Las respuestas están aquí, al alcance de tu mano; por que cuando continúas el camino correcto, las cosas maravillosas comienzan a suceder, entonces, te sientes más libre para poder decidir. De eso se trata la libertad, de tener opciones, ahora.

Soy psicólogo, Entrenador de PNL, Soy músico, soy cantante, soy amigo, soy persona, soy yo. La importancia es que esto solo define una parte de mí, de lo que yo hago. Soy mis pensamientos y mis acciones.

Hoy me lanzo, valientemente, con la mentalidad de un niño de 4 años, esperando encontrarte en mi camino y transformar nuestras vidas.

Por lo demás, todavía conservo la chaqueta.

Este soy yo.

BIENVENIDO.

Francisco Arenas Caviedes
Psicólogo Clínico – Comunitario
Licensed Trainer of NLP™
Licensed Master Practitioner of NLP™
Specialist Practitioner in Neuro Hypnotic Repatterning™
Especialista en Hipnosis Ericksoniana.
Por THE SOCIETY OF NLP™, USA.
Especialista en Psicopatología y evaluación Psicométrica.